Continuando con nuestro post... frío, bajas temperaturas, nuestro bebé y dudas, ¡muchas dudas!
Muy importante no caer en sobre abrigar a nuestro pequeño. Te explicamos por qué.
Siempre tendemos a sobre abrigar a los bebés, a ponerles demasiada ropa, aunque dentro de casa esté la calefacción puesta y la temperatura sea muy agradable. Esto lo que puede provocar es que aparezca febrícula o fiebre debido a que los bebés tienen calor.
Pero… ¡aún hay más!
Una temperatura corporal elevada puede provocar miliaria, erupciones en la piel que arden y pican. No es peligrosa, pero sí molesta para el bebé.
Más peligroso aún: aumenta el riesgo del síndrome de muerte súbita del lactante
Aquí algunos TIPS… ¡lo vas a hacer bien!
- Se recomienda que los bebés lleven solo una capa adicional de ropa más que los adultos.
- Nunca se debe colocar al bebé cerca de la calefacción
- La calefacción nunca debe superar los 21ºC, la temperatura que se considera ideal. Estar en invierno en casa con manga corta es una señal clara de que se está haciendo un mal uso de la calefacción.
- Igualmente, cuando está encendida la calefacción hay que prestar más atención a la hidratación de la piel. El uso de este tipo de elementos suele hacer que el ambiente se vuelva más seco, por lo que puede ser interesante complementar su uso con un humidificador. Esto ayudará a evitar esa sequedad en la piel del bebé.
Y es que los bebés no tienen la capacidad para autorregular su temperatura corporal. Por esta razón, solo hay que abrigarlos lo necesario, mantenerlos lejos de la calefacción y tener especial cuidado durante las noches.
Lo mejor: sigue tu intuición, tu instinto, observa a tu bebé. Y recuerda: la mejor manera de dar calor a tu bebé, besos y abrazos.